Capítulo 37

Penelope miró rápidamente a su alrededor, asustada de que alguien pudiera escuchar.

Michael se rió.

—Mira cómo estás, toda nerviosa. Penelope, ahora eres la señora Davis, pero llevas el bebé de otro hombre. Si esto se sabe, ¡tu vida será un desastre!

—¿Quién era el hombre esa noche? —exigió Penel...

Inicia sesión y continúa leyendo