Capítulo 58 No dañes el vínculo que hemos construido

Emily se quedó paralizada, su corazón latiendo como loco. No podía creer lo que estaba escuchando. Su mano flotaba en el aire, sin saber qué hacer a continuación.

—Patrick, no hagas esto, por favor —suplicó Shirley, su voz quebrándose con sollozos. Al escucharla, la mano de Emily tembló en el pomo ...

Inicia sesión y continúa leyendo