Capítulo 226

Los dos subieron al coche y salieron por las puertas de la Mansión Smith. Diana finalmente pareció relajarse, recostándose en su asiento y cerrando los ojos.

Stanley sostuvo su mano, sus dedos aún un poco fríos. No preguntó nada, solo permaneció en silencio a su lado.

Después de conducir un rato, ...

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