Capítulo 258

Stanley se quedó congelado, mirando la puerta que acababa de cerrarse, sintiendo que toda su fuerza se había drenado.

Se desplomó en su silla, presionando sus sienes palpitantes con las manos.

Unos minutos después, se levantó abruptamente, agarró su abrigo y salió apresuradamente.

No podía dejarl...

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