Capítulo 325: Te dije que te arrodillaras

Hubo un golpe en la puerta. Ambos se voltearon, y Crystal sonrió al ver que el sirviente finalmente había regresado con el botiquín de primeros auxilios.

Crystal asintió y dijo —Estaba a punto de irme. Por favor, cuida bien de sus heridas. No quiero que se infecten.

Nathan frunció el ceño y detuvo...

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