71. Visita domiciliaria de Angel

—No puedo acompañarte, porque hay un evento importante.

—Está bien, estaremos bien aquí —respondió Angel casualmente.

Erick dirigió su mirada hacia la pequeña Erlena que estaba en el regazo de Angel, inclinándose ligeramente para alinear sus rostros. —Mi querida, tienes que ser buena y no molestar...

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