Capítulo 8

Poppy y yo nos inclinamos simultáneamente hacia adelante para dejar nuestras tazas de café en la gruesa mesa de café de madera frente a nosotras. Tanto el Alfa Brock como el Beta Pete parecían necesitar algo más que un café. Sus rostros apenas envejecidos lucían pétreos y fríos, más allá de molestos...

Inicia sesión y continúa leyendo