Golpe, golpe, golpe.

Masticaba lentamente, ya no saboreaba el sándwich. Sus palabras seguían dando vueltas en mi cabeza—“Incluso si significa quedarse atrás cuando ellos lo hagan.”

No era solo algo poético o noble. Era la verdad. Su verdad. Lo que el Velo es para Elliot... no es un propósito. Es una maldición. Está atra...

Inicia sesión y continúa leyendo