201. «Protégete esta vez».

Las palabras de Christopher hacen que mis ojos se abran con una escalofriante y creciente realización. Mi corazón da un vuelco, y hasta mi respiración se detiene en mi garganta, como si mis pulmones hubieran olvidado cómo funcionar.

—Sé que he sido un imbécil por mucho tiempo— continúa, sus ojos su...

Inicia sesión y continúa leyendo