41. El color del pecado

En el silencio del armario, reviso cada detalle de mi apariencia en el espejo, especialmente el rojo cereza que pinta mis labios. Por mucho que me cueste admitirlo, realmente se siente diferente cuando una mano profesional te arregla.

Todo en mí parece audaz, tan diferente de mi yo habitual, pero no...

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