101. Prueba de paternidad

ALLISON.

Llevé a Amaris al cuarto de bebé, sus llantos resonando por el pasillo y tirando de cada nervio desgastado en mi cuerpo. Mi mente estaba por todas partes y lo único que me mantenía de no colapsar era mi hija. Me dolían los brazos de sostenerla, y maldije en silencio por no haberme preparad...

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