Capítulo 6_ Acosadores experimentados
Chloe sacó su dispositivo móvil y, en cuestión de segundos, le mostró a Arya una imagen de Kane Maranello mientras afirmaba:
—Es él, ¿verdad?
Arya simplemente asintió, diciendo:
—Así es... Y estoy en un aprieto.
—¿Por qué? —preguntó Chloe, inclinando la cabeza con curiosidad.
—Porque es una situación peculiar y me encuentro en medio de ella —reveló Arya, sacando su propio teléfono mientras ambas comenzaban a buscar información sobre Kane, como expertas acosadoras.
—Mira, él y Franko no aparecen juntos en ninguna fotografía. Esto es una anomalía para un padre y un hijo —reflexionó Arya en voz alta.
—Parece que tienen alguna vendetta personal el uno contra el otro. De todas formas, deberías tener cuidado. Es conocido por ser un mujeriego —advirtió Chloe.
—Oh, no te preocupes por eso. No tengo ningún deseo de convertirme en una de sus conquistas —aseguró Arya, provocando una sonrisa en Chloe.
—Claro, querida. Pero nunca digas nunca cuando se trata de hombres guapos —bromeó Chloe.
—Por favor, no empieces de nuevo, Chloe —se quejó Arya.
—Está bien, está bien. Esta noche estamos aquí para celebrar tu ascenso y el fin de semana. ¡Vamos a la pista de baile! —exclamó Chloe emocionada.
—¡Absolutamente, hermana! Qué idea tan espléndida —sonrió Arya, terminando su bebida de un solo trago.
—¡Wooooo! Esa es mi chica —dijo Chloe, guiñando un ojo mientras se dirigían a la pista de baile, perdiéndose en la música y la energía pulsante de la multitud. El ritmo, las luces y la gente que rodeaba a Arya la ayudaron a dejar de lado sus preocupaciones mientras bailaba toda la noche.
Después de un tiempo, Arya estaba sedienta y decidió tomarse un descanso de la pista de baile, con Chloe siguiéndola de cerca. Chloe pidió dos cervezas más y Arya exclamó:
—¿No crees que ya hemos bebido suficiente por una noche?
—¡Ni cerca! A veces olvidas que hay más en la vida que solo trabajo —comentó Chloe mientras Arya dejaba escapar un pequeño suspiro.
—Sabes que no puedo hacer lo que me plazca —añadió Arya, ganándose una mirada de exasperación de Chloe.
—Lo sé, pero no puedes seguir trabajando tanto. Apuesto a que te llevaste trabajo a casa para el fin de semana —afirmó con confianza.
Arya dudó antes de responder:
—Bueno... me llevé algunos papeles, pero parece que los he perdido. Déjame revisar mi bolso. —Mientras buscaba en su bolso, sus pensamientos corrían, 'Juraría que los traje conmigo. ¿Dónde podrían estar?' Pero a pesar de su búsqueda minuciosa, los papeles no aparecieron. Arya dejó escapar un suspiro frustrado—. ¡Maldita sea! Estaba segura de que había traído esos papeles conmigo.
—¿Qué pasó? —la curiosidad de Chloe se despertó.
—Tengo que volver a la oficina —anunció Arya, para disgusto de Chloe.
—Debes estar bromeando —bufó Chloe.
Arya negó con la cabeza—. No, realmente necesito esos papeles y tengo que ir a buscarlos. —Miró a Chloe con disculpa—. Lo siento, Chloe. Te lo compensaré. Puedes beber mi cerveza.
Chloe resopló—. Eres imposible, Arya. En serio. —Mientras Arya recogía su bolso y se dirigía de vuelta a la oficina, Chloe gritó en voz alta—. Bueno, lo siento por ti, pero doble diversión para mí. Diviértete siendo responsable. —Arya se despidió con la mano, una pequeña sonrisa en su rostro.
====
Mientras Arya entraba en el edificio de oficinas tenuemente iluminado, no podía evitar pensar en las incontables veces que había entrado en ese espacio desolado los fines de semana para trabajar. Sin embargo, esta noche era diferente.
Las luces fluorescentes de su nueva oficina aún estaban encendidas, indicando la presencia de alguien dentro. '¿Quién podría ser?' Arya se preguntó mientras empujaba la puerta, su curiosidad despertada.
Para su sorpresa, Kane estaba sentado despreocupadamente en su escritorio, absorto en algo en la pantalla de su computadora. '¿Qué está haciendo aquí todavía?' Arya pensó para sí misma, negándose a reconocer su presencia mientras se ocupaba de sus asuntos. Buscando en cajones y armarios, escudriñó cada rincón de la oficina, decidida a encontrar los archivos que necesitaba.
Mientras buscaba por todas partes, con la frustración en aumento, la voz de Kane de repente rompió el silencio.
—¿Buscas esto? —dijo perezosamente, sosteniendo el archivo perdido en sus manos.
—¿Cómo conseguiste eso? —demandó Arya, perpleja de cómo el archivo terminó en su posesión.
—Lo saqué de tu bolso —respondió Kane con una sonrisa burlona, haciendo que Arya se enfureciera.
—Gracias por arruinar mi noche con tus estúpidas bromas —resopló Arya, arrebatándole el archivo.
—Tenía que hacer algo para traerte de vuelta aquí, lejos de todos los demás —explicó Kane, su tono volviéndose ronco mientras daba un paso hacia Arya, su aroma embriagador llenando sus sentidos.
—¿Y por qué es eso? —Arya no pudo ocultar su molestia, mirándolo con sus penetrantes ojos ámbar.
—¿No es obvio? Porque te quiero, Sunshine —Kane susurró, su intensidad palpable mientras acortaba la distancia entre ellos.
