Capítulo 089 Un alivio

—¡Ah!!! —La boca de Mario estalló con un grito como el de un cerdo degollado. Era fácil imaginar lo doloroso que debía ser que le rompieran el dedo de nuevo, especialmente cuando acababa de ser entablillado.

Ethan soltó su dedo, sonrió levemente y dijo:

—Realmente detesto a las personas oportunist...

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