Capítulo 30

Daniel

Sabía que eso la lastimaría, pero también la haría darse cuenta de cuánto me ama. La idea de que otra mujer me tocara la volvería loca. Ella seguía llorando. Se acercó a mí.

—Lo siento, te lastimé, deja de llorar amor. Me encargaré de eso y de ti, te amo, Athena, pero no se detendrán.

—Pre...

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