Capítulo 87 Las lágrimas falsas no funcionan

—Hermana, ayúdame...— La voz suplicante de Emily resonaba en la escalera mientras se acurrucaba contra la pared, acorralada por Aurelia Sullivan.

Jade se quedó congelada en el rellano, observando la escena. Las uñas perfectamente arregladas de Aurelia—rojas brillantes con diminutos cristales—se cer...

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