Helados y noticias inesperadas

Decidí que después de la semana que había tenido, era hora de algo simple y dulce—literalmente. Así que llevé a Laura y Larry a su heladería favorita. La pequeña tienda en la esquina de la Quinta siempre estaba llena de familias, sus paredes en tonos pastel y el olor a conos de waffle frescos eran u...

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