Capítulo 10

Me quedo ahí acostada durante horas, mirando al techo, tratando de convencerme de que estoy exagerando. Solo era un nombre. Solo una coincidencia. Dixon no sabe dónde estoy.

Alrededor de las diez, escucho su moto rugir y desvanecerse en la distancia como siempre. El ritual nocturno de Tristan de pa...

Inicia sesión y continúa leyendo