13. Error de pago

Cuando Max llegó a casa, lo primero que preguntó fue por Gabriella.

—La mujer está despierta, señor. Pero parece fuera de sí. No para de llorar y gritar, así que tuve que encerrarla en la habitación —explicó el mayordomo nerviosamente.

—¿No ha comido aún? —preguntó Max con el ceño fruncido.

—No, ...

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