Capítulo 82

Los ojos de Amelia se abrieron de par en par. —¿Qué? ¡De ninguna manera!

No podía creerlo. ¿Chris había perdido la cabeza? ¿Cómo podía pedir algo tan ridículo?

Chris no se enfadó. En cambio, sonrió y levantó su barbilla. —¿Qué otra opción tienes además de estar conmigo?

Una fría chispa cruzó los ...

Inicia sesión y continúa leyendo