OCHENTA Y CINCO

Olivia abrió los ojos lentamente, mientras el sueño se desvanecía, su mano aún extendida en la habitación vacía. La realidad de su situación volvió a golpearla. Lucas no estaba allí, no vendría a salvarla, estaba sola.

…….🌵

A la mañana siguiente, Olivia se despertó con un dolor sordo en su cuerpo...

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