CAPÍTULO SESENTA Y CUATRO

—Hola —dice Samantha, entrando en la habitación mientras yo cerraba mi maleta.

Sin y yo nos íbamos a Nueva York en una hora, así que estaba revisando mis cosas para asegurarme de que había empacado todo.

—Hola —respondí, sentándome en la cama con un suspiro.

—Todavía me entristece que te vayas hoy —...

Inicia sesión y continúa leyendo