Brujerías de señoras que toman té

Violeta.

—¿Eras bruja? ¿En serio? ¡No jodas! —Clara me hacía contarle con lujo de detalles cada cosa que veía en las regresiones y después se me reía en la cara.

—Bruja no, estúpida. Una especie como de curandera.

—¿Te viste?

—No —negué con la cabeza—. Solo mis manos preparando como menjunjes o algo...

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