119

LYRIC

Pasaron varios minutos. Cuando no escuché ni una palabra de Jaris, tuve que mirarlo para asegurarme de que realmente estaba en el coche conmigo.

Sí estaba. Solo que se veía... distante. Enojado. ¿En qué estaba pensando?

—Gracias— sollozé, esperando traerlo de vuelta. Lo hice porque me miró....

Inicia sesión y continúa leyendo