167

La noche cayó.

No fue hasta que mi estómago empezó a rugir que me di cuenta de que no había comido desde la mañana.

Fui a la cocina y lo único que encontré listo para comer fue pan. Había muchas cosas de comida, pero ninguna comida cocinada o almacenada. Me hizo preguntarme si Jaris había comido a...

Inicia sesión y continúa leyendo