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Mi mandíbula tocó el suelo en completa sorpresa.

No podía apartar los ojos de Jaris. ¿Qué en el nombre de la luna?

Esta no era la reacción que esperaba. Pensé que me llamaría de todo y me insultaría. ¡Pero estaba tomando esto mejor de lo que esperaba!

—¿Qué? —la voz de Roderick sonaba desconcerta...

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