Capítulo 176

Frío. Esa fue la primera sensación que se filtró en mi conciencia mientras lentamente recuperaba la lucidez. Mi cabeza latía con dolor, y un sabor metálico persistía en mi boca—sangre, mi propia sangre. Intenté moverme, pero descubrí que mis brazos estaban sujetos, firmemente sostenidos por dos homb...

Inicia sesión y continúa leyendo