24, hora del té

Como Ayya esperaba, su padre tuvo una pequeña crisis nerviosa después de escuchar que se ofreció para adentrarse en un bosque infestado de lobos. Pero con la ayuda de su madre, lo calmó. Luego le explicó cómo casi se quemó viva en la posada.

—Eso es todo. Mañana hablaré con Tariana y me aseguraré d...

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