CAPÍTULO 140

Finn entró en la habitación como si hubiera sido alcanzado por un rayo. Sus ojos estaban abiertos de par en par, su pecho se agitaba y sus manos temblaban a sus costados.

—¿Qué demonios pasó? —preguntó, su voz aguda y quebrada en los bordes.

Amara se estremeció al oírlo, pero no apartó la mirada. ...

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