CAPÍTULO 232

Esa noche, después de largas horas de planificación, Saphira y Nikolas finalmente se permitieron descansar. La quietud de su cámara los envolvía, el fuego ardiendo bajo. El brazo de Nikolas la rodeaba protectora mientras el sueño los reclamaba a ambos.

Pero en sus sueños, Saphira se encontró de pie...

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