CAPÍTULO 47

Saphira estaba allí, en su forma de dragón, su enorme figura arraigada al suelo mientras trataba de procesar el cambio.

Su visión era aguda—cada hoja, cada movimiento en la distancia era tan detallado que casi la abrumaba. Su oído era increíble, captando incluso el más leve susurro de criaturas ocu...

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