CAPÍTULO 60

Saphira se sentó al lado de la cama de Zafira, sus dedos trazando patrones contra la tela de su manga, perdida en sus pensamientos.

Su dragón estaba quieto. Presente, pero tranquilo, observando—no inquieto, sino atento.

Llevaba aquí un buen rato, vigilando, esperando cualquier señal de cambio, cua...

Inicia sesión y continúa leyendo