CAPÍTULO 69

El claro todavía palpitaba con la tensión que no se había ido del todo—no después del rugido, la rabia y la verdad que había agrietado el suelo bajo los pies de Saphira. El olor a tierra quemada persistía en el aire. Su pulso resonaba en sus oídos, pero ya no era por miedo. No exactamente.

Frente a...

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