CAPÍTULO 83

Con las alas extendidas, la luz del sol reflejándose en sus escamas en brillantes destellos de plata e índigo, Saphira volaba—aunque un poco tambaleante—sobre el territorio de la manada. Su vuelo había comenzado con batidos irregulares, unos cuantos descensos torpes que le hicieron latir el corazón,...

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