Capítulo 135

Ophelia dejó escapar un suspiro de satisfacción y se recostó en su silla, acariciando su vientre lleno.

—Ah… Eso estuvo delicioso —dijo, cerrando los ojos felizmente—. Juro que la comida aquí es mucho mejor.

Leonard y yo intercambiamos miradas divertidas desde el otro lado de la mesa de la cocina....

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