Capítulo 35.

Petter estaba vestido con unos shorts de mezclilla y una camiseta azul claro. Me tranquilizaba verlo así, feliz, al menos en esos momentos, olvidaba lo que estaba pasando.

La revelación iba a tener lugar en el vestíbulo del condominio de la nueva casa que Petter me regaló. Sí, me dio una casa enorme...

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