Capítulo 314

Miré a los ojos de Julian, y él me devolvió la mirada. Por un momento, no existía nada más que nosotros dos y el océano detrás de nosotros, las olas rompiendo y estrellándose contra la orilla arenosa.

—Espero que lo digas en serio —dije. Deseaba desesperadamente que él fuera feliz, y sabía que nunc...

Inicia sesión y continúa leyendo