Capítulo 47

Pero sabía que eso no era más que mi instinto animal no queriendo creer que ella estaba muerta. En el fondo, ya lo sabía. Ella se había ido. No podía sentir su pulso. No creo que nadie pudiera estar vivo después de eso.

—Señor, necesita ver esto —dijo el médico, sacándome de mis pensamientos.

—No ...

Inicia sesión y continúa leyendo