Capítulo 100

Helios estaba encaramado en la cama con dosel esperando a Luna cuando ella entró tambaleándose.

—¿Y bien? ¿Cómo te fue? —Los esperanzados ojos verde guisante de Helios eran demasiado para la cansada chica, y ella rompió a llorar una vez que la puerta se cerró solemnemente detrás de ella, abrazando ...