capítulo 290

—Hey —llamó Andrew, tomando mis manos suavemente en las suyas—. ¿Qué estás haciendo? —dijo, mirándome con un pequeño brillo en los ojos, un brillo que me decía que me amaba.

‘No, no hay manera de que él…’ No pude completar ese pensamiento porque él apretó mi mano, borrando cualquier duda que tenía....

Inicia sesión y continúa leyendo