capítulo: Dueña de su duro corazón

—Señorita Russo— Cedric está sorprendido y Sofía se percata de ello.

—Cedric, deja de mirarme como si fuera un fantasma, a menos que me estés mirando porque estoy más hermosa que antes— camina con elegancia y coquetería, mirando la sala de estar—. Todo está tal cual como lo dejé— sonríe, pero luego ...

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