No te atrevas

—¿Por qué crees que nunca fui a verte cuando recuperaste la conciencia? Estaba tanto asqueado como asustado. Fue la primera vez que me avergoncé de mí mismo. En ese momento, incluso lo lamenté. Todavía lo hago. Odio haber hecho lo que hice…

—¿Entonces por qué diablos lo hiciste? Éramos amigos, homb...

Inicia sesión y continúa leyendo