Enfermo

Vince sonaba demasiado excitado. Eso encendió un firme latido en medio de mis muslos.

Nunca he sido fácilmente excitada y necesitada por nadie. Pero solo con mirarlo, solo con inhalar su aroma... me vuelvo tan malditamente deseosa y eso no está bien.

Y luego empeora cuando está tan cerca. Cuando m...

Inicia sesión y continúa leyendo