Estás por tu cuenta

Su silencio era todo lo que necesitaba saber. La ligera rigidez en su postura y la forma sutil en que evitaba mi mirada. Pero no quería sacar conclusiones precipitadas. Necesitaba oírlo de su boca. Darle el más mínimo beneficio de la duda.

—No sé nada al respecto, Padre…— Pero incluso sus palabras ...

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