Capítulo 24: Arte

Hana

Me siento en el asiento del copiloto, observando la ciudad a través de la ventana aún empañada por la lluvia anterior. El cielo ahora está despejado y estrellado, y si no fuera por las calles mojadas, nunca habría imaginado que había pasado una tormenta tan fuerte.

John y yo habíamos pasado l...

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