No quiero saber

CULLEN

Debí haber calculado mal mi tiempo, o tal vez soy así de tonto. Porque para cuando despierto con Sarah en mis brazos, hay una sonrisa extendiéndose por mi cara... justo antes de que los golpes en la puerta me recuerden por qué la tengo en mis brazos en primer lugar.

Esta mañana solo podría ...

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