Besó a tu esposo

SARAH

Estoy nerviosa como el demonio. Mis palmas están húmedas y mi corazón no deja de latir con fuerza. Elegí un vestido negro, por si acaso me lanzan algo. No quiero arriesgarme a usar blanco, aunque sea mi color favorito.

Cullen aprieta mi mano mientras caminamos hacia la puerta principal. En e...

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