Capítulo 120

Ariel abandonó el evento como si el mismo infierno la hubiera escupido. Sus tacones resonaban contra el mármol del vestíbulo con la precisión de una sentencia de muerte, mientras Noah intentaba seguirle el paso sin perder el ritmo y sin tropezar con su propia peluca rubia.

—Ariel, cálmate... —inten...

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