Mi príncipe

Richard revisó el libro mientras se acercaba. Dijo, con un asentimiento— Bueno, supongo.

—Mi príncipe, su madre era increíblemente talentosa— Adela charlaba amigablemente.

—¿Te gusta leer, verdad?— Richard miró a Adela y preguntó.

—Me encanta leer, príncipe— dijo Adela con tono emocionado.

Richa...

Inicia sesión y continúa leyendo