CAPÍTULO 51: Son las pequeñas cosas de la vida...

No nos despertamos al día siguiente hasta la hora del almuerzo. Pedimos servicio a la habitación, nos vestimos y fuimos a encontrarnos con la agente inmobiliaria. Nos mostró apartamentos, condominios, casas adosadas, de todo. Teníamos mucho que asimilar, así que Celeste decidió que quería pensarlo m...

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