CAPÍTULO 259

—¡AHH!— grité de dolor insoportable cuando aterrizamos en el suelo de acero del puente. Me dolía el estómago, mi lobo aullaba, mi compañero gemía y Kelly respiraba con dificultad por el agotamiento.

Todavía estábamos muy lejos de la Estación por la ausencia de cualquier sonido, pero yacíamos allí, ...

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